Desde mi Cocina
Por Silvia Betancourt Alliegro
¿CUÁL SERÁ EL PEOR INVENTO DE LA HUMANIDAD?
¿Las fronteras, las religiones, o los
héroes?
El planeta Tierra no tiene un día de sosiego desde que
algún humano puso una bandera, o una
barda de piedra para aislarse de los otros animales, especialmente de los de su
misma especie, y tengo la impresión, por conocimiento propio, de que lo hizo
porque supo –y sabe- de lo que él es capaz.
Herencia y consecuencia directa de esas tapias
materiales son las nacionalidades, que no son otra cosa que tribus concentradas
en un territorio para defender ‘sus’ patrimonios –ignorando (a veces a
propósito) que todo ser vivo se rodea de ritos y mitos- para darle determinadas
coordenadas a su irrisoria vida predeterminada, encaminada siempre e
ineludiblemente hacia la muerte del cuerpo que es el que ocupa espacio y genera
contiendas por lo mismo.
¡Caramba con los griegos, que idearon todo y nadie ha
podido abolir su troquel: Democracia!, y el que se atreva siquiera a insinuarlo
será conducido a cualquiera de las hogueras contemporáneas: el ostracismo, la
ridiculización, la calumnia, la cárcel o el cementerio. Se esgrime la lanza que
es laza: Democracia, junto al nombre de
sólo un Dios, sin enrojecer ante la historia, pues los griegos adoraban a varios y varias; ellos
entronizaron las religiones y sus vástagos: los sistemas políticos que a su vez
fueron inmortalizados por la poesía, que describió hazañas míticas en su geografía
política.
Al héroe se le perdonaba (y perdona) todo, sólo porque
gana una batalla –en la que siempre hay miles de seres humanos masacrados-
Ahora, hoy, he podido constatar que los patrones
tienen razón en querer ser los dueños absolutos del poder ¡revisionista y
reaccionaria yo! pues sí, hasta a mí me cuesta creer lo que estoy escribiendo,
pero tengo razones: cuando los ‘oprimidos’ llegan a tener una cuota de poder
–por mínima que sea- se convierten ipso facto en réplica manifiesta de los
opresores; y copian y duplican a cabalidad todos las acciones contra la
humanidad que alguna vez padecieron, especialmente aprenden a ser pedantes y
perversos con sus antiguos ‘compañeros de luchas’; hechos que no se pueden
observar con los amos tradicionales, que acarician la cabeza del subyugado, así
sea para decapitarlo; y le sonríen y abrazan en épocas preelectorales, además
de ofrecerles obsequios esenciales.
Infortunadamente, los sometidos únicamente quieren que
les cedan el látigo, para que sepan todos los pobres del mundo, que aprendieron
a usarlo con mayor destreza que los
amos; y con ellos, con los odiados (pero
en el fondo envidiados) oligarcas, harán negocios, porque para eso se
capacitaron viajando por el planeta viaticando como dirigentes sindicales o
directivos de alguna ONG, codeándose con los poderosos del Primer Mundo que les
acogen sin ascos por aquello de las materias primas que ahora les dicen
recursos naturales, y por la ristra humana que importarán para ‘servicios
varios’.
Muchas guerras tuvieron que padecer los naturales de
los países que ahora se dicen Socialistas, es decir: Demócratas y Liberales,
por lo anterior, no entiendo cuál es el estigma ante esa palabra antepuesta a
tres ubicaciones espaciales: izquierda, centro, derecha.; pero…han soslayado
dos puntos primordiales: arriba y abajo.
@yastao
Son todos tan nocivos que no podría elegir. El hombre se complicó la vida cuando empezó a fabricar sus dioses fuera de la Madre Naturaleza, de su amada Pachamama y dejó de adorar al sol y a la luna y al agua y al fuego, para adorar la personificación de sus pasiones y le fabricó dioses a la guerra y a la venganza y a tantas otras cosas hasta llegar en la vida moderna a adorar al dinero y al poder alcanzando su mayor grado de deshumanización.
ResponderEliminar@luisfo1951 en twitter
Qué esplendor de verdades acabas de emitir, apreciado Luis Fernando. algo así hubiera querido escribir. Gracias por leer mi blog, incentivas mi imaginación.
ResponderEliminarGracias a ti Silvia por tus aportes, son escritos que estimulan el pensamiento y motivan la búsqueda en nuestro propio intelecto.
EliminarAlgunos valores de la izquierda son: El librepensamiento y la emancipación de las personas,la protección y amparo de los débiles, mientras que la derecha favorece al fuerte,la tolerancia, el respeto a la diversidad humana y natural,el apoyo y la defensa de la paz en el mundo entero, sin guerras preventivas ni vulneración del Estado de Derecho.
ResponderEliminarNo son valores socialistas "el dogma".El dogma es un valor esclerotizado, inmune a todo, fijo y perenne; no puede discutirse porque apela a realidades que se tienen por eternas, lo cual casaría mal con la crítica y la refutación.
De manera personal y luego de éste preámbulo, y respondiendo a este interesante articulo, me guía la búsqueda de la mayor igualdad posible, la mayor justicia social, y esa razón de ser razón de ser debemos buscarla en los derechos sociales del ciudadano; la sanidad universal, gratuita y de calidad que es un bien innegociable, conseguido entre todos y que ahora la derecha nos usurpa, la educación es la política; conseguir que todos seamos capaces de elegir con criterio sin manipulaciones, libremente, es la esencia de la participación política.