sábado, 24 de agosto de 2013

POESÍAS PARA MÚSICOS


Antípodas


Habito dentro de mí
Muy a tu pesar
Y la brisa del trópico se confunde con mi aliento
Y mis lágrimas y sudor son independientes de ti

No podrás alcanzar mis sensaciones
Tu cuerpo habita en regiones para hombres
Que gruñen, blasfeman, acechan y cazan
Todo lo que se mueva

Tendrías que recorrer senderos de espinas
Sangrar cada mes
Reír por no llorar
Atesorar libros antiguos, besarlos y esconderlos

Podrías intentar navegar contra corriente
Zarandear  la masa hasta lograr tortillas
Correr hasta la esquina y cosechar frescura
Besar la ropa tendida al sol y al viento

Y antes del anochecer
Acicalarte para verte rosa abierta y sin espinas
Esperando esparcir perfume y color
A pesar de una mirada cargada de desprecio

Caer rendida y vencida donde sea
Para que el alma navegue
En las esferas invisibles y musicales
De otros fantasmas vivos o muertos
Que un día fueron conmigo
Fuego, ternura, cama y mesa



INSTRUMENTOS

Antes de que finalice el sueño
Pienso atrapar tu mensaje
Relámpago de lucidez
Intangible
Deslizándose por el tiempo
Unos signos pueden emitir
música soñada quinientos años atrás

¡Rompe la barrera del tiempo!

Acaricia mi alma
Endereza mis huesos
Me acerca a ti
Que careces de olor

Imagino esas herramientas
Que han facilitado
Tus signos y los míos
Manos
Amadeus
Tu música es diferente a la mía
No hecha para seducir, sólo para vivir
con las eras sin tiempo   

Mi música es él, sin rostro, sin recuerdos
Nada hemos compartido en estos cuerpos
Que habitamos
Sólo las creaciones que ascienden
En conjunción irrepetible
Y por una vez nada más

Dos teclados que se aman en las noches
En las tardes duermen y sueñan
Para espantar lo terrible de la vida terrenal
Que pide comida

Y con ese gusto netamente animal
Vencidos somos
Llegan los habitantes de cuerpos y nos vencen
Cuando reclaman yantar

Tú y yo sabemos en qué se convierte ese alimento
Ni mencionarlo
Abraza mi alma
Y obséquiala al tiempo

Con tu música inmaculada, blanca, rosada, gris, lánguida y plena
Amadeus, sé tu nombre, ignoras el mío
La rueda del tiempo nos separa
Y aún así habitas en mí 




RITMOS LEJANOS


Vuelven los boleros
A entrometerse en mi vida
Recorriendo espacios llenos de telarañas

Y éste lugar que no entiende
Lo que siento

Mientras tanto, todos mis hermanos
Gritan y saltan
Recorren mil veces los años vividos

Y los pies mentales se agitan, saltan,
Corrigen los pasos antiguos

DUELO DE TECLADOS


No insistas en encontrar ternura a tu paso
Créala tú
Permite que tus manos adheridas a un tiempo
horaden las mentes amorfas de tu raza, de tu condición

Ignora los códigos civiles
Inventa los propios
Elabora uno  para poetas
Permítete ser diferente, sin ufanarte

Deja de lado tus atisbos al mundo de ellos
No los alcanzarás,
No te captarán
Eres alma perdida entre las carnes de extraños

Vacíate de dolor ahora que puedes
Y entre la multitud espantosa de cuerpos perfumados
Busca las almas cercanas a tu esfera
Ellas comulgarán contigo sin apremios, sin pedidos

Permítete existir con toda tu esencia
Crea tu propia música
Besa a Amadeus, suspira con él
Y toca con todos tus dedos a los de aquí
Imágenes creadas para ti en este tiempo de asesinos
Del cuerpo y del pensamiento

¿Qué música me asombra hoy?
Suena, resuena, ataca mi felicidad de tocar, tocar
Para sentir que el universo es chiquito cuando él está al teclado
No lo podrás alcanzar con tus palabras, sólo siéntele aquí, hoy

No dejes que se escape, él cree que tus teclas con letras
No sirven para hacer música
Compruébale que sí, que le sigues
Y vuelve y juega con el alado ser que maneja el teclado
Con abismales asombros, se queda quieto, vuelve y juega
Me está enloqueciendo, piensa él

Pero aunque no lo desee, comulga conmigo hoy
Si no se esfuerza más, no importa
Yo lo puedo repetir en mis sueños

Mira bien, mi otra alma, ahora llego agresivo, bailarín,
Danzante de caminos y de horas
Que azota este teclado desde un rincón
Y rompe las barreras humanas

Para decirte ven aquí, donde seremos uno y nada
La separación será imposible
Porque tú eres yo
Porque yo soy tú

Deja de gritar en ese teclado
Ven recuéstate en mis pechos y mama de ellos
Soy lo que tú necesitas:
Madre amor para tu especie

¡Deja de gritar en el teclado!
Ven aquí, déjate mimar, baja tu cabeza ante mí
Mujer soy, motivo de orgullo y de maldición

Casi me vences hoy, mi pequeño tierno y cariñoso
Que anhela su instrumento para comunicarse con distancias
Infinitas, imposible medirlas
Pero sé que estás cerca de mí, miras mis manos
Y padecemos el tormento de crear
En instrumentos diferentes

La narración debería comenzar:
En un principio existía la nada
Y se crearon los teclados, los dedos, las almas, el amor,
El viento, los colores ocres, lentos, atardecidos
Se obviaron los espejos
Para permitirnos ser bellos sin saberlo

Ven, duerme junto a mí, será hermoso morir si estás cerca
Toma mi mano al salir del túnel estrecho y perverso
Ven, compendio de tranquilidad
Permítete ser feliz con lentitud, ya el tiempo no existirá

Seremos colores, sonidos perfectos
Exactamente como salidos de tu piano hoy
Ven, anula los otros,
Pero el de la brisa edificando el árbol
¡Déjalo intacto!



MÚSICA,  Narración desde Bach


Discurres con la secuencia lógica de cada existencia
Abarcas desde el nacimiento hasta la muerte
Pero antes
Nos haces vislumbrar la felicidad  proporcionada
Por los sentidos encarnados
Acercándonos a lo que de eterno tiene la sustancia
Imaginada que llamamos alma.
En cada movimiento deslizas al oído
Sentencias a vivir
Insoslayables y repetibles.
Y permites una mirada al futuro
Muy despacio, con fruición.
Autorizas a imaginar ambientes,
Pensamientos, olores y colores
En dimensiones de aleteos y susurros.
Junto a ti, música, podemos ser etéreos
Átomos de los sentidos.
Pero también nos dejas asomar
A nuestra meta insoslayable
Con lentitud y dulzura
Casi narras el hecho irrepetible
Y no es traumático
Se siente pleno, distante y cercano.

Mimas el descanso y la transmutación
Acercándonos con ternura magistral
Nos implantas en un útero sin carne
Donde ya nada dolerá.
Y mutados en ti
Recorreremos senderos libres
Planearemos como aves
Dibujando silencios, fabricando placidez







CANCIÓN DE CUNA


Ven y te canto una canción
Para cambiar tu rumbo
Te canto que aún es posible reír
Si eres inocente
Y esa risa no tendrá el rastro de hiena
Del que ríe por sorna
Ella trasladará tu mundo
Junto con tu coro
Hacia un mar que existió
Veinte siglos atrás en el tiempo gregoriano
Cuando se navegaba a golpe de remo
O al ritmo del viento
Y en cada viaje se paría una canción
Para espantar el miedo y la añoranza
Ríe así...
Muéstrale al que se  embarca
Que lo importante no es el arribo
Si no la travesía
Que si se hace cantando
El ritmo le llevará hasta un puerto
Donde los que levitan
Le abrazarán con una enorme risa
Que ignora idiomas, razas, continentes y tiempos


ESPERO MI PARAÍSO



Soy criatura creada del barro
Del planeta Tierra
Por tanto, terrícola

Le temo a los terremotos
A los gritos, las tormentas
Y a las cucarachas

Me gustan las aves, los ancianos
Los niños, los sonidos del silencio
La música de Mozart y de la brisa
Las estrellas, los libros, la vegetación
El olor, el calor y el mensaje del mar

Me disgustan las miradas
Sin ternura
La maledicencia
Los chiflidos y las cucarachas

El cielo, espero, sea un lugar
Donde no existan desastres naturales,
Chiflidos,  cucarachas
Y humanos que griten y calumnien





BAILE


Conjunción de esqueleto
E intestinos
Se siente la calavera
En plenitud refulgente
Y muestra el movimiento
Del espíritu prisionero
De los intestinos que
Nos obligan a danzar
Sobre la tierra
Sin ellos
La música carecería de vibraciones
Conectados al armazón
Son enlace pleno






Otra canción, cántala 


Yo, tu ángel, te  respondo
Deja a los humanos retornar a lo natural
La creación dejó sin brazos ni piernas
Al tronco que fue la humanidad
Deja que el demiurgo llegue a tu alma
Recorre con él las eras sin espacios ocupados
Así te parezca redundancia
No hay forma de definir los espacios sin objetos
Objetos que perfuman y mienten
Rastro de bestias, fieras que arañan la madera
De los árboles del campo
Y en tu cama se notan los estragos
Todo está conectado
No eres alma errante, eres inmortal
No te dejes vencer,  eres bello y musical


SILENCIO


Eres ser interior
Lo de afuera se ignora
Retorna al útero
Tu madre no es tu padre

Si sólo fueras
Persona que habita espacio temporal
Pero insistes en gritar
Para recalcar que existes
Esos gritos no son música


BASADA EN PAPERCUT (Corte de papel)

Plácido espacio que fabricas
Con tu instrumento corporal
Piensa, no duermas
Existes en un espacio exterior
Y tu interior se rebela
Quieres ser único
No podría ser
¿Quién constataría que eres?

No te alejes, todos forman parte de esta realidad
De ti quedará lo que desees
(Que el odio no se entronice)
Careces de caridad, admite que tienes defectos
Ahora, ríe, y come, que se enfría




HAGAMOS EL AMOR AHORA


Cuando sólo seamos huesos dispersos
Cuando lo tangible deje de ser
Quedarán estas notas monocordes
Inmersas en ellas mismas
¿Habrá lectores? No lo sabremos.

Y recorrerán las letras
Espacios perdidos
Buscando anhelantes ser comprendidas
Y utilizadas

Habrá  esqueletos futuros
Que sentirán la eternidad
En otros ojos que después no serán
Y tanta lágrima vertida
Fecundará los campos. Para siempre, alguien

Mientras, entonemos hoy un canto
A la vida que aún vibra
Permitámonos ser felices
Al lograr aspirar una bocanada de aire
O el humo de un cigarrillo

Removamos nuestros pesares de la dermis
Dejemos que ella sienta las manos
Encallecidas, sobar, estrujar, pellizcar

Así, cuando seamos fertilizantes
Germinarán hermosas flores
que harán felicies los ojos
que un día no serán 

YASTAO





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